16 febrero 2008

CASCARILLEIRADAS. 9 .

En los primeros días del mes de octubre de 1925, los modestos industriales de A Coruña que ejercían la profesión de afiladores, expresaron su gratitud a la Alcaldía por haber revocado la orden dictada anteriormente de no dejar sonar el característico silbato que señalaba su paso por las calles. Y así los “chifles” volvieron a sonar más armoniosos que nunca por las avenidas coruñesas.

No hay comentarios: